Con frecuencia se levantan en Extremadura voces contrarias al AVE, intentando mantener a Extremadura fuera de la red ibérica de alta velocidad como única región excluida.
Se pretende apoyar este argumentación con planteamientos ideológicos, con datos manipulados y ocultando gran parte de la realidad de la linea de Alta Velocidad Madrid-Lisboa.
El AVE es irrenunciable.
1º.- No se trata de un tren concreto nuestra petición, sino de una infraestructura ferroviaria moderna, que permite circular AVE, pero a la vez una alta densidad de otros trenes con seguridad como Alvia, Avant, Altaria, Regionales, Cercanías, Mercancias o Turísticos. La red que se está construyendo, y que debemos conseguir que se termine con la máxima urgencia es mixta de pasajeros y mercancías. Decir lo contrario es mentir.
2º.- La linea del Corredor Sudoeste Ibérico es la linea de Madrid-Lisboa de Alta Velocidad, aprobada como preferente en los programas de la Unión Europea como ramal interior del Corredor Atlántico y el Corredor Atlántico-Mediterráneo. Es mixta pasajeros-mercancías. La conexión de Lisboa/Sines con Madrid permite que a medio plazo adquiera una gran densidad de tráfico del que puede aprovecharse Extremadura tanto por el número de servicios diarios como por el reparto de sus costes de infraestructura y explotación. No hacerla de Alta Velocidad entre Madrid y Lisboa, con una distancia de 600 Km, impediría que se usase con intensidad (pe Sevilla-Madrid hay 30 trenes diarios), tráfico que se desviaría por Salamanca o iría en avión, evitando Extremadura. No hacerla de Alta velocidad sería perpetuar el aislamiento de Extremadura.
3º.- Una vez construida toda la red de alta velocidad de España, alegar que es una infraestructura cara la de Extremadura siendo la única en entredicho, no evita ningún gasto, ni para los Extremeños ni para España. La linea de Extremadura es la menos costosa de la red ibérica, y menos lo que queda. No hacerla de Alta Velocidad apenas reduciría la inversión y si disminuiría la capacidad de densidad de uso posterior e incrementaría los costes de su explotación como única linea diferenciada de larga distancia con otra tecnología, que no sabemos cual es la que se propone.
Pronunciarse en contra de la Alta Velocidad en Extremadura es una irresponsabilidad que esperemos que tenga poco eco.